A veces no se trata de lo que hacemos sino de cómo hacemos las cosas que nos traen felicidad, alegría y paz; o alternativamente, ansiedad, stress, o insatisfacción, dependiendo de cómo dirigimos nuestra energía.
Como seres humanos, por supuesto a veces luchamos, como cuando intentas algo nuevo o bajo una circunstancia difícil. Sin embargo, no necesitamos crear una historia que no tengamos más remedio que sufrir.
Gran parte de nuestro sufrimiento se perpetúa a sí mismo.. Cuando el agotamiento mental nos hace omitir el autocuidado y convertirnos en inquietud, estamos reforzando una historia que no somos lo suficientemente dignos.
Si esto no se detiene de inmediato, incluso podríamos caer en una espiral descendente.
Así que cambia tu equipo. Sintoniza un canal diferente.
Deja ir “No puedo…””Tengo que…””No estoy autorizado…”Si no hago esto, No puedo sobrevivir…” este tipo de mentalidad y abrazan más espontaneidad. Espero el breve video a continuación (también hecho a través de la espontaneidad) te animará.
Haz algo diferente hoy. O si estás haciendo lo mismo, permítete sentirlo y abordarlo de manera diferente. Lo mundano solo es mundano si lo tratamos como mundano.
Enciéndete.
Con amor,
Yiye